28 jul 2022

Educar ( Gabriel Celaya)




Educar es lo mismo
que poner motor a una barca…
hay que medir, pesar, equilibrar…
… y poner todo en marcha.

Para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino…
un poco de pirata…
un poco de poeta…
y un kilo y medio de paciencia
concentrada.

Pero es consolador soñar
mientras uno trabaja,
que ese barco, ese niño,
irá muy lejos por el agua.

Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia islas lejanas.

Soñar que cuando un día
esté durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos seguirá
nuestra bandera
enarbolada.

14 jul 2022

Teoría de la relatividad ( Ana Montojo)

                    


Cuando ya he olvidado todo 
lo inolvidable
y hasta lo imperdonable lo tengo
perdonado,
y he transferido a otros mi alma
 intransferible
y he renunciado a tantas causas
irrenunciables,
aprendo a comprender lo incomprensible
y me llena de dudas lo indudable.

Como lo razonable es pura sinrazón
 ya no puedo prever lo previsible
  pero albergo esperanzas de encontrar un remedio
  a tanta irremediable pesadumbre
  y terminar por fin este largo camino.
 Interminable.

Puestas así las cosas se me ocurre
 que todo es relativo.  
Tal vez pueda vencer a lo invencible.

7 jul 2022

Una mujer desnuda y en lo oscuro ( Mario Benedetti)




Una mujer desnuda y en lo oscuro
tiene una claridad que nos alumbra
de modo que si ocurre un desconsuelo,
un apagón o una noche sin luna,
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda.


Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera un resplandor que da confianza;
entonces dominguea el almanaque
vibran en su rincón las telarañas
y los ojos felices y felinos
miran y de mirar nunca se cansan.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
es una vocación para las manos;
para los labios es casi un destino
y para el corazón un despilfarro.
Una mujer desnuda es un enigma
y siempre es una fiesta descifrarlo.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera una luz propia y nos enciende;
el cielo raso se convierte en cielo
y es una gloria no ser inocente.
Una mujer querida o vislumbrada
desbarata por una vez la muerte.